La empresa mexicana Cine Móvil ToTo viaja hasta una comunidad y elige un lugar para ofrecer una o más funciones de cine de manera gratuita. Puede ser la plaza central, una cancha de futbol o una avenida. Hace difusión del acontecimiento y despliega una pantalla, coloca sillas, prepara un proyector y recibe a los asistentes: niños y adultos de todas las edades.
Antes de iniciar, se informa a los espectadores que, para poder disfrutar de la función, es necesario que cuatro voluntarios pasen al frente y pedaleen unas bicicletas, las cuales proporcionan la energía para poder activar el audio, la consola de sonido, una computadora, el reproductor de discos Blu-ray y otros aparatos. Una sola persona puede pedalear durante toda la función, o bien, se organizan reemplazos entre los espectadores.
Los creadores del proyecto aseguran que un día soleado les da la oportunidad de ofrecer hasta cuatro funciones en una jornada e, incluso, el panel funciona en días nublados, ya que es capaz de captar la radiación solar y es posible dar hasta dos funciones cuando el Sol está ausente.
El show comienza con un cortometraje provisto por Ecofilm, un festival internacional de cortometrajes ambientales que se realiza anualmente en México y cuya misión es sensibilizar a la sociedad sobre la problemática ambiental, promoviendo la producción audiovisual y la cultura ecológica. Los cortos van desde la animación, hasta el documental o la ficción. A través de ellos, se intenta generar en los asistentes una cultura del cuidado del medio ambiente, como no tirar basura en las calles, cuidar el agua y la luz, y no maltratar los árboles o a los animales.
Después de esta introducción, se proyecta una película mexicana de larga duración. El proyecto pretende ser también un impulsor del cine nacional.
“Podemos ofrecer funciones hasta para 300 personas, y a la gran mayoría le es muy atractivo pedalear nuestras bicicletas para generar la energía necesaria para verlas”, comenta, en entrevista, Diego Alfonso Torres, cofundador de Cine Móvil ToTo.
Explica que las bicicletas son, en realidad, cuatro bicigeneradores conectados a un capacitor, que funciona como un gestor de energía, el cual la envía a un inversor, que la convierte a 110 voltios, la misma energía que proporciona el enchufe de un hogar común. El panel solar es de silicio y produce 350 Watts por hora, suficientes para accionar el proyector y ofrecer hasta cuatro funciones por día.
La empresa y sus creadores
El proyecto surgió en el año 2012, a raíz de un programa llamado “El cine en tu comunidad”, una “ruta” realizada por el Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine), en la que trabajó Diego Alfonso Torres y que consistió en llevar a diversas comunidades una sala de cine móvil durante seis meses, desde Quintana Roo hasta el Estado de México. Sin embargo, Diego detectó diversos problemas durante ese recorrido, entre ellos, que muchas personas no tenían una cultura del cuidado del medio ambiente y que había muy poco impulso al cine mexicano.
Ahí nació la idea crear Cine Móvil ToTo (Toda la gente, Todos los lugares) y, buscando algo que los diferenciara de otras organizaciones que ya ofrecían cine al aire libre, se encontraron con un documental llamado Rodando por México, protagonizado por los Ginger Ninjas, un grupo de rock californiano que realiza giras en bicicleta desde San Francisco hasta Chiapas, y la electricidad para dar vida a sus instrumentos y amplificadores se genera mediante el pedaleo de sus vehículos de dos ruedas.
En 2013, Diego y su socio fundador, José Roberto Serrano, comenzaron a construir sus primeros bicigeneradores, pero las primeras versiones eran muy limitadas. En ese año conocieron a Dante Espinosa, el ingeniero de audio de los Ginger Ninjas, quien los asesoró en la construcción de los bicigeneradores que actualmente utilizan. Y, para ayudar en la producción de energía, decidieron agregar un panel solar que diera vida al proyector. Con esto, la naciente empresa se convirtió en la primera en ofrecer cine utilizando dos tipos de energía renovable: la cinética y la solar.
En 2014, el equipo se dedicó a buscar contenido nacional para toda la familia y, en 2015, Cine Móvil ToTo se constituyó como una empresa SC. En ese año participaron en una convocatoria de Estímulo Fiscal al Cine (Eficine), en la que consiguieron fondos para el proyecto. El estímulo se organizó en colaboración con la Secretaría de Hacienda y la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México: consistía en que algunos contribuyentes destinaran parte de sus impuestos a un proyecto de cine.
“En 2016, realizamos nuestra primera gira formal como Cine Móvil Toto, en la que ofrecimos 95 funciones en cinco estados de la república: Quintana Roo, Yucatán, Campeche, Tabasco y Chiapas. En ese mismo año, participamos en otra convocatoria para buscar fondos para una nueva gira, [que fue la] que dimos en este 2017, llamada “Primavera con Cine Móvil ToTo La Central”. Ofrecimos 50 funciones en cinco estados: Puebla, Guanajuato, Michoacán, Colima y Nayarit; tuvimos un total de 11,800 espectadores”, cuenta Diego Torres, quien tiene una licenciatura en Comunicación Visual por la Universidad de la Comunicación.
La empresa ganó, en 2014, el Premio UVM al Desarrollo Social. También participó en una incubadora de negocios de Bancomer y New Ventures y ganó el Campamento Audiovisual Itinerante, en la categoría de Exhibición. Además de haber participado en las convocatorias de Eficine, ha quedado como finalista en otros concursos.
Los planes
Cine Móvil ToTo planea constituirse también como una AC para darle un poco más de formalidad al proyecto y aliarse con distribuidoras, fundaciones, gobiernos y empresas que patrocinen las giras y que, en un futuro cercano, puedan obtener utilidades mediante un modelo de negocios que no afecte la esencia del proyecto.
“Para este año, planeamos hacer una gira por Baja California Sur, que empezaría a mediados de octubre. Serán, aproximadamente, 20 funciones por toda esa zona. Para 2018, pensamos armar un recorrido por cinco estados y ofrecer 100 funciones, pero [éste] aún está en etapa de planeación”, señala Diego, quien tiene 32 años y vive en la Ciudad de México.